1x01 . can you keep a secret?

La "reunión" con Darian resultó estupenda. Pude saciar mi apetito de lujuria con él, incluso creo que me excedí un poco y como que me rebosé de energía sexual. En parte, era lo bueno de hacerlo con un vampiro, su energía era casi infinita. Luego, organicé todo rápido con mis chicos y chicas. Esta noche, montaríamos en un lugar del bosque un "puesto avanzado". Allí teníamos bebida, algo de droga suave (hachis y marihuana sobre todo XD) y algunos recipientes herméticos con sangre en su interior. El puesto avanzado no era más que un jeep con los cristales tintados donde guardábamos todo. Tras darle algunas indicaciones a los chicos (no dejar el coche abierto, vender si es posible y sobre todo... pasarselo estupéndamente) me puse una copa de vodka con lima y me encendí el porro de yerba que me había hecho. Entonces, a velocidad de vampiro me alejé de mis empleados y fui hasta donde se congregaban los fiesteros. Yo iba sin camisa y con una gorra echada hacia atrás (foto on!!). No tardé mucho y me encontré con uno de los clientes del Luxury. Un pequeño muchacho de nombre Caleb. -Ey Cal...-lo llamé amistosamente. -Tu siempre estás listo para una fiesta...-le dije sonriendo. Le di un sorbo a mi copa y le estreché la mano a modo de saludo. Yo estaba pletórico. El encuentro con Darian me había cargado totalmente las pilas. -Ey!. Que puedo decir? mala costumbre de la gran manzana-me dijo. Sonreí a su chiste. -Que tal va el negocio?-me dijo señalándo a Shade. -No me quejo la verdad...-le contesté mientras le daba una calada al porro que venía fumando. -Espero que no se aprovechen de los chiquillos inocentes-dijo entonces. Lo miré, fingiendo estar ofendido. -Parece mentira que pienses eso de mí y de mis empleados...-le dije. -Aún recuerdo cuando llegaste al Luxury la primera vez...-empecé a recordar. -¿Acaso nos aprovechamos de ti?-le pregunté sonriendo. Bueno, yo había intentado seducirle, dejando la influencia de mi íncubo de lado, pero Caleb había resultado ser bastante heterosexual... al menos es lo que me pareció. Uno nunca sabía a día de hoy las preferencias de los demás... el mundo se estaba transformando en algo muy ambiguo... y adoraba eso. -Dime Cal, hay alguien que te interese? Puedo enterarme de si el sentimiento es recíproco...-le dije picarón al muchacho.

Cassie Owen
25 años // Humana con habilidades
Arqueóloga, Buscatesoros y Cazadora. Miembro de la Orden de la Cruz Negra
Comisaría Policía Ft: Alex McCandles

Lo cierto es que no encontré nada, volví a coger aquella extraña caja de madera que había heredado de mi padre. Un cofre que no superaba el tamaño de una caja de zapatos, decorado con símbolos celtas de protección, como creando una barrera mágica. No poseía cerradura ni forma física para su abertura. Por lo que no había conseguido descifrar su contenido. Además, había un jeroglífico, que no sabía lo que podía significar, a pesar de haberlo comparado con amigos y expertos de todo el mundo. No había encontrado nada similar a ese símbolo. Dejé el cofre en su sitio y tras comer algo, puse rumbo hacia la comisaría de policía. Tal vez allí podría conseguir algo de información.
Al llegar, fui al mostrador de información y pedi hablar con el detective o quien fuera que llevara el caso del hombre asesinado en el bosque. Con mi credencial de agente del FBI, creyeron que estaba aquí por el gobierno y me enviaron con un tal Alexander McCandles. Uno de los funcionarios me condujo hacia su despacho, y tras tocar la puerta y anunciar mi llegada, nos dejó solo al oficial y a mi. -Buenas noches señor McCandles-le dije mientras le estrechaba la mano. -Por favor, llameme Alex-me dijo él. sonreí complacida. -Mi nombre es Cassandra Owen-no acostumbraba a usar mi nombre verdadero para estos casos, pero dado que llevaba algun tiempo en Haven, era mejor no mentir más de lo necesario. -Estoy aquí por el asesinato acaecido en los bosques del pueblo hará algún tiempo...-comenté. -Bueno, en realidad, fue hace una semana... y sí, comprendo su estancia en el pueblo. Aunque no soy partidario de la cantidad de agentes que han enviado... quiero decir, no se ofenda, pero creo que no confían en absoluto en la policía local pese a que somos la comunidad con el índice de asesinatos más bajo del país. Eso debería decir algo en nuestro favor-su sonrisa parecía sincera y me invitaba a sentirme segura. -Y bueno... usted dirá, ¿en que puedo ayudarla?-me quedé mirándolo. Claro que habían muchos agentes del FBI por el pueblo... era una de las tapaderas que más usábamos los cazadores de seres sobrenaturales y hoy en día, el pueblo era un hervidero de cazadores. -En primer lugar me gustaría agradecer el que su departamento haya accedido tan amablemente a ayudarnos en nuestra investigación, y lamento muchísimo todas las molestias que ello pueda causarle.-le dije, devolviéndole la sonrisa. -También me gustaría informarle de que no todos de los que dicen ser agentes del FBI lo son realmente...-le comenté. Parecía alguien digno de confianza, y yo me guíaba por mi instinto. -Pero eso no importa ahora...-negué levemente con la cabeza. -He estado merodeando por los bosques y no parece haber nada significativo que pueda ayudar a identificar al asesino o asesina...-le comenté. -Su gente está más familiarizada con el terreno... han encontrado algo que pueda servir para seguir la investigación?-le cuestioné. Siempre era bueno contar con el equipo local de tu lado... las cosas se facilitaban tremendamente.

Aún recordaba lo que había sentido al ser "atacado" por la parte demonio de Val. En primer lugar, me excité, muchísimo. Mi miembro reaccionó casi al instante y antes de que pudiera darme cuenta, me encontré completamente empalmado y deseando arrancarle la ropa a Val para poseerla en ese instante. Pero mi cuerpo no reaccionaba y comencé a sentir al mismo tiempo dos sensaciones completamente distintas. La primera y más clara de definir, fue placer. Un placer que superaba con creces el propio acto sexual. Mi cuerpo se estremecía y mi respiración se volvió completamente irregular. Al mismo tiempo, sentí como que perdía fuerzas. Es como si llevara horas y horas practicando sexo y mi cuerpo perdiese su energía. Pero no era agradable, pues no estaba perdiendo la energía, me la estaban robando...
Cuando Val se desmayó y recuperé el control sobre mi mismo, la cargué hacia mi apartamento. No creí oportuno llevarla al Luxury aún, primero tenía que abrir su mente a la influencia de su demonio interior. La dejé descansando en mi cama mientras yo comía algo. Entonces me llegó el aviso de Dirdel sobre reunirnos en el Luxury antes. Llamé a Luke sobre el asunto y me contó lo de la fiesta, así que le dejé una nota a Val, para que estuviera tranquila cuando despertara y no viera a nadie conocido y el lugar extraño. Esperaba que la encontrara, pues se la dejé al lado de la almohada. Entonces me dirigí al Luxury y preparamos todo lo necesario. Luke había decidido que hoy sería un día libre, por decirlo de alguna manera. Más que nada, tendríamos que dar publicidad al local, hablar con los jóvenes y demás.
Yo, como siempre, estaba cubierto totalmente. Mi rostro quedaba oculto en una capucha y al ser de noche, pues apenas se notaban mis aspectos demoníacos. No obstante, parece ser que alguien me reconoció, pues de repente escuché. -Shade!!!-me giré y vi que Val se acercaba a mi. Me mantuve estático. -Nesesito hablar contigo...-me dijo ella. Vale, quería hablar conmigo. Sin dudas de lo ocurrido en el parque por la tarde. -Se que probablemente ya no quieres ni estar cerca de mi... Solo quiero pedirte perdon-me dijo. La miré totalmente serio. -Tienes razón, debes disculparte...-le dije. Mi tono era más rudo del normal. -Pero no soy yo con quien debes hacerlo...-miré a nuestro alrededor. La gente parecía divertirse y no prestaba atención a nuestra conversación. -Con quien debes disculparte es contigo misma Valerie.-sabía que no le gustaba que la llamaran así, pero quería que mis palabras se quedaran grabadas en su mente. -Disculparte por morirte de "hambre"... disculparte por dejar que te hicieran creer que eres mala... disculparte por no aceptar como eres realmente y crear a Lola para sentirte mejor...-mis palabras se fueron ahogando. -Y sobre todo...-volví a cogerle la mano, para que me viera la expresión. -Disculparte por no dar las gracias por mi hospitalidad y no estar disfrutando de la fiesta.-le dije mientras sonreía con ganas. Su expresión era realmente graciosa. Su boca entreabierta y sus ojos casi desorbitados. La despeiné levemente, como hace un hermano con su hermana pequeña y le ofrecí de mi copa. Licor de coco con piña colada. -Un trago?-le pregunté.

Katie Fitch
18 años // Humana con habilidades
Estudiante
Casa Fitch Ft: Emily Fitch
Hacía tiempo que nos habíamos instalado en este pueblo y mi hermana parecía no mejorar. Conmigo hablaba, se divertía, jugábamos... pero no era lo mismo. Las fiestas sin ella perdían glamour, la popularidad no era igual si ella no la compartía conmigo... Pero ella parecía estar dispuesta a seguir con su autismo selectivo. Y yo comenzaba a desesperarme. ¿Cuando regresaría mi hermana y se marcharía ese autómata que ocupa su lugar? Empezaba a creer que nunca podrían volver a ser iguales las cosas. Y lo peor de todo era no saber qué le había llevado a cometer aquel acto suicida. Sabía que algún desencadenante tuvo que haber sido, pero no daba con él y obviamente, no le iba a preguntar a mi hermana. Y allí estábamos las dos, en nuestra habitación, cada una sentada en su cama. Yo más que dispuesta a irme a la fiesta que había hoy en el bosque, y ella prácticamente con el pijama puesto. -VAmos Ems...-le dije por enésima vez. -Será divertido...-le volví a decir. Pero para mi hermana, la palabra diversión parecía haber perdido todo el significado. -Es en el bosque...-le dije. -Vamos, nos estamos un rato y volvemos...-le dije. -Por favor...-le dije mirándola con carita de niña buena...

Como no, Lynne se largo cabreada y diciendome unas bonitas palabras, y al final me dijo que ella misma compraria un billete para volver a Forks... que queria dejarme sola en mi camino a la felicidad con el monstruo que estaba a mi lado, si seguramente no se hubiese llegado a ir le hubiera dado un bofeton... Me quede sentada en el sofa suspirando, todo era compilcaciones, cuando empezaba a creer que se habian acabado, simplemente volvian. Alguien pico la puerta, crei que seria Lynne, que yo que se , se habia olvidado algo, o simplemente hariamos las paces... pero no, levante la vista y era Alice... sonrei levemente. -Bella?? Hola Bells. - Se acerco a mi, sentandose a mi lado y me abrazo... me imagine que ya sabria que habia pasado... -¿Quieres que haga algo? - Negue con la cabeza, soltandome suavemente de su abrazo para mirarle a la cara. - ¿Ya sabes todo no?. - me frote las manos algo nerviosa... - Como ves siempre hay problemas a mis lados... - sonrei tristemente. - Pense que os habiais ido... estaba llamando a casa continuamente y no me cogiais el telefono... ya sabes... por Emmet. - me imaginaba que lo supiese, era Alice...